Terapia para la autoestima baja
¿Qué es la autoestima?
La autoestima es la valoración que hacemos sobre nuestra persona en relación a distintos aspectos: sobre nuestra forma de ser, nuestra inteligencia, nuestra forma de relacionarnos…
¿Y nacemos con ella? ¿Nacemos con la autoestima alta o baja?
La respuesta es no, no nacemos con ella, sino que se desarrolla con el paso del tiempo, con las experiencias vividas y con la información que nos llega de otras personas, como veremos a continuación.
Causas de una baja autoestima
Aunque la autoestima se refiera al YO (auto de autoestima), es algo que se construye socialmente a través de los mensajes que vamos recibiendo de personas importantes. Especialmente a lo largo de los primeros años de vida, pero no exclusivamente.
También las experiencias que vivimos tienen un impacto sobre nuestra autoestima, pero cuidado: más que los hechos que vivimos, lo que nos impacta es la interpretación que hacemos de nuestras experiencias.
No es lo mismo vivir una situación de maltrato, y además interpretar que fue culpa nuestra que interpretar que no fue justo que nos trataran así, ¿verdad?
La brecha de género
En la construcción de nuestra autoestima influyen muchos factores, pero se sabe que la educación que recibimos tiene un gran peso: así, hemos aprendido en un mundo machista que las mujeres estamos por debajo en la escala social, por lo que no es de extrañar que la autoestima de las mujeres sea de media menor que la de los hombres*
Sí, existe una brecha de género en la autoestima entre hombres y mujeres.
Desarrollamos lo que se conoce como discriminación interiorizada: aunque no queramos, aunque no nos demos cuenta, interiorizamos esa idea de ser menos. Menos capaces, menos competentes, menos importantes, menos ingeniosas, menos inteligentes, menos interesantes, etc.
Tendemos a tener una autoestima más baja, especialmente en el plano de la autoestima corporal ¡pero no solamente!
Podemos sentirnos inferiores o poco válidas en cuestiones muy variadas, depende de cada mujer, de su historia de aprendizaje, de sus experiencias…
Además, a las mujeres se nos educa con más probabilidad en ser complacientes y eso nos lleva a menudo a saltarnos nuestros propios límites y vivir nuestras vidas más pendientes de cumplir las expectativas de terceras personas que de alcanzar nuestros propios sueños y proyectos.
Señales de una baja autoestima
Tienes falta de autoestima si…
–Te comparas muy a menudo con otras personas en aquellas cosas que te acomplejan
–Eres demasiado perfeccionista y autocrítica
–Evitas con frecuencia situaciones o actividades para las que no te sientes preparada o por miedo al qué dirán o al qué pensarán
–Te duelen todas las críticas que recibes, las vives siempre como un ataque y una puesta en duda de tu valor
-Tienes mucho miedo a cometer errores, lo que puede desembocar en bloqueos y en la parálisis por análisis (posponemos las decisiones que tenemos o pedimos que las tomen por nosotras)
-Sientes miedo al rechazo por lo que le cuesta decir “no”, dar una opinión contraria… ya que estamos en busca de la aceptación fuera de nosotras.
–Dudas en exceso de tu propio criterio
–Antepones siempre las necesidades ajenas a las tuyas propias
Claves para mejorar la autoestima
Hay varios hábitos que dañan tu autoestima. Trata de identificarlos para ponerles freno y conseguirás sentirte mejor contigo misma:
Conecta con tus propios deseos o necesidades:
Deja de decir(te) cosas como “no me importa”, “me da igual”, “lo que prefieras”… ante cosas o situaciones que en el fondo sí sean importantes para ti.
Esto solo es una forma de inhibirte para evitar enfrentar un posible conflicto, pero a largo plazo, nos vuelve aún más inseguras y es muy frustrante darte cuenta de todas las oportunidades que se pierden por el camino.
Reduce tu auto-exigencia:
A menudo, la baja autoestima pasa por un discurso interior muy flagelador, salpicado de auto-exigencias y presiones, como “yo debería haber sacado mejor nota/yo no debería cometer ni un error/yo debería ser… no ser…”.
Hazte consciente de qué cosas te exiges y trata de ser flexible.
Conoce tus fortalezas y áreas a mejorar:
Ten en cuenta que cuando hay baja autoestima, distorsionamos sin querer nuestra visión personal. Por lo que es posible que cueste encontrar las fortalezas. Haz un análisis lo más objetivo posible; para ello, puedes ayudarte de personas que te conocen y te aprecian, situaciones que has superado a lo largo de tu vida y que demuestran que cuentas con ciertas habilidades y fortalezas.
Por otro lado, ten cuidado con las áreas a mejorar: ¿hay alguna manera de aceptarte un poquito más aun en esos aspectos de ti misma que no te gustan y quieras mejorar? y después, pregúntate ¿qué pequeños pasos puedo ir dando para alcanzar ese objetivo?
Terapia para trabajar tu autoestima
Para empezar, deja de ponerte condiciones para quererte.
Esto que por desgracia es bastante habitual: cuando me tonifique un poco, me querré más. Cuando apruebe esa oposición, me querré más…
¿Por qué? Porque ni el amor que recibes ni (especialmente) tu amor propio puede depender de lo que consigas o no, de tus metas o de tu comportamiento. Igual que no puede depender de las opiniones o comentarios ajenos.
También se trata de analizar qué cosas, personas, situaciones… te están robando seguridad en ti misma a día de hoy. Si está bajo tu control, alejarte o eliminarlo de tu vida ¡no lo dudes!
¿Quieres mejorar tu autoestima pero no sabes por dónde empezar?
Si quieres que valore personalmente tu situación y te ayude a fortalecer tu relación contigo misma, puedes pedir una valoración totalmente gratuita:
También puedes echarle un vistazo al cuaderno de trabajo de autoestima, una caja de herramientas que bebe de la Psicología Feminista y que he creado con mucho amor.
